1 de mayo de 2009

BARTLEBY,EL ANTIHÉROE PERSISTENTE DE LA NEGACIÓN

El arte en la sombra de Kumi Yamashita


A diferencia del héroe, el antihéroe surge de la observación de la prosaica realidad. El tiempo transcurre, la literatura evoluciona, y el héroe baja de su pedestal y queda a la altura de los lectores. En su lucha cotidiana no priman las certezas, sino la ambigüedad. El antihéroe, hijo del pesimismo, ya no constituye un modelo a seguir: nace como respuesta a un presente no deseado y vive sin ninguna promesa de futuro.


EL ANTIHÉROE MODERNO QUE PROPONE EL SILENCIO COMO REBELDÍA

Podía darle limosna para su cuerpo, pero el cuerpo no le dolía; era su alma la que sufría y yo no podía alcanzarla".


"Preferiría no hacerlo"

Bartleby es el personaje principal del relato Bartleby, el escribiente (1853), del norteamericano Herman Melville. Misterioso y hermético, Bartleby se rebela contra una sociedad opresora mediante la resistencia pasiva y el abandono. Su respetuoso grito de guerra, "preferiría no hacerlo", simboliza la soledad y la alienación del hombre moderno y la inutilidad de la existencia. Bartleby es el precursor de la negación que triunfa en el arte y las letras del siglo XX.

Bartleby, el escribiente, es un relato inquietante en el que sorprende el comportamiento del protagonista del que sólo conocemos la descripción del narrador (un abogado de Wall Street) y un dudoso rumor sobre el pasado de su empleado Bartleby que se caracteriza sobre todo por su determinación de preservar su intimidad y persistir en su extraña actitud. Al comienzo del relato el narrador comenta sobre el protagonista:

"...a las biografías de todos los amanuenses prefiero algunos episodios de la vida de Bartleby, que era uno de ellos, el más extraño que yo he visto o de quien tenga noticia. De otros copistas yo podría escribir biografías completas; nada semejante puede hacerse con Bartleby. No hay material suficiente para una plena y satisfactoria biografía de este hombre. Es una pérdida irreparable para la literatura. Bartleby era uno de esos seres de quienes nada es indagable, salvo en las fuentes originales: en este caso, exiguas. De Bartleby no sé otra cosa que la que vieron mis asombrados ojos, salvo un nebuloso rumor que figurará en el epílogo..."




Andy Warhol, La sombra


LA REBELDÍA ANTE LO INJUSTO Y UNA VISIÓN ESCÉPTICA DE LA EXISTENCIA

La genial respuesta de Bartleby "Preferiría no hacerlo", una negativa educada y sutil, supone una respuesta rebelde, pero no violenta, que refleja el cansancio del hombre ante su destino incierto y vacío. Bartleby es el abanderado de la resistencia pasiva, la del hombre inacción que busca cambiar el mundo a partir de la reflexión de los otros. Las continuas negativas a los requerimientos del abogado hacen que éste se tambalee por comprobar que está perdiendo el principio de autoridad. Poco a poco Bartleby va ganando terreno y se va encerrando cada vez más.Cuando se niega a copiar los documentos, el abogado- que trata de comprenderlo- cree que el problema reside en sus ojos cansados por el trabajo. Pero Bartleby, cuya tara no es la del invidente, sino paradójicamente la del visionario, está diciendo en silencio que se le escapa la vida. El abogado trata de echarle sin éxito y acepta la inactividad del escribiente a pesar de las protestas de los clientes del bufete y los compañeros. Ante el peligro que amenaza su reputación, el abogado se traslada a otro local para alejarse de Bartleby que se resiste a abandonar las antiguas oficinas y se va convirtiendo en el símbolo de la resistencia pasiva en el corazón de Wall Street. Finalmente, el amanuense ingresa en prisión sin oponer resistencia alguna hasta que se deja morir de hambre.

El relato finaliza con un breve epílogo del narrrador en el que comenta que el extraño comportamiento de Bartleby puede tener origen en su pasado cuando trabajó en la Oficina de Cartas No Reclamadas, en Washington:


" Conciban un hombre por naturaleza y por desdicha propenso a una pálida desesperanza. ¿Qué ejercicio puede aumentar esa desesperanza como el de manejar continuamente esas cartas muertas y clasificarlas para las llamas? Pues a carradas las queman todos los años. A veces, el pálido funcionario saca de los dobleces del papel un anillo -el dedo al que iba destinado, tal vez ya se corrompe en la tumba-; un billete de Banco remitido en urgente caridad a quien ya no come, ni puede ya sentir hambre; perdón para quienes murieron desesperados; esperanza para los que murieron sin esperanza, buenas noticias para quienes murieron sofocados por insoportables calamidades. Con mensajes de vida, estas cartas se apresuran hacia la muerte. ¡Oh Bartleby! ¡Oh humanidad! "


Las palabras finales ¡Oh Bartleby! ¡Oh humanidad! podrían interpretarse como la equiparación del destino trágico del escribiente y el del ser humano, o bien como la responsabilidad de la sociedad en su aniquilación.


Leer el cuento :




LA LITERATURA DEL NO


Bartleby, el escribiente es uno de los más célebres relatos breves de la Literatura Universal. Ha sido considerado un relato precursor del existencialismo y de la literatura del absurdo. Existe, además,un paseo literario triste y maravilloso que comienza con Bartleby, el escribiente, continúa con Jacob von Gunten (1909) de Robert Walser, y culmina en El proceso de Kafka (1914). En estas tres obras el comportamiento de los personajes es infrecuente , misterioso, y desaparecen en silencio tras una vida sin sentido.

Enrique Vila- Matas, inspirándose en el relato de Melville, publicó en 2001, Bartleby y compañía; en esta obra designa como "bartlebys" a aquellos escritores que renunciaron, por variadas razones, a seguir escribiendo.


"La gloria o el mérito de ciertos hombres consiste en escribir bien; el de otros consiste en no escribir". Jean De La Bruyère

En esta novela un narrador (en algún momento descubrimos que se llama Marcelo) escribe un diario a la deriva compuesto por 85 notas ensayísticas, que rastrean y analizan "la literatura del No" considerada la más perturbadora y atractiva tendencia de las literaturas contemporáneas, pues sólo de la pulsión negativa, del laberinto lúcido del No, puede surgir la escritura por venir. Por sus notas desfilan toda una serie de autores que ,al menos en algún momento de su vida,padecieron el síndrome del silencio creativo o han hablado de él: Socrátes , Rimbaud ,Kafka, Musil, Juan Rulfo, Salinger , Wilde en sus últimos años en París (" Cuando no conocía la vida, escribí; ahora que conozco su significado, no tengo nada más que escribir")... Entre las causas del abandono de la escritura se cita la locura de Hölderlin , internado 38 años en la buhardilla del carpintero Zimmer en Tubinga, o de Robert Walser encerrado en manicomios y dedicado a una febril actividad de letra microscópica, indescifrable en minúsculos trozos de papel.También hay bartlebys españoles: Pepín Bello, amigo de los poetas del 27, sorprendentemente ágrafo a pesar de su genialidad artística o Antón Castro calificado como el escritor del No por excelencia...Incluso existe una Biblioteca del No, la Biblioteca Brautigan en Estados Unidos, formada por manuscritos rechazados por todas las editoriales del mundo.


Varga Llosa y Vila- Matas ( de espalda), foto de Daniel Mordzinski

¿Por qué ese silencio de grandes escritores en un determinado momento de su vida? ¿Por qué algunos seres geniales se niegan a escribir? ¿Les abandonaron las palabras?. El mal de bartleby es un tema desconcertante y atrayente. Al final de su vida, Tolstoi vio en la literatura una maldición y entonces renunció a escribir, porque dijo que la escritura era la máxima responsable de su derrota moral... Una noche escribió en su diario una frase que no logró terminar:"Fais ce que dois, advienne que pourra" ( haz lo que debes, pase lo que pase). Cuando era el escritor más famoso de su época huyó en un tren que se dirigía al sur y emprendió un viaje hacia la muerte. Atrás quedaba en su diario la última frase de su vida, la frase abrupta, malograda en su desfallecimiento bartleby:

Fais ce que dois, adv...


Muchos años después diría Beckett que hasta las palabras nos abandonan y que con eso queda dicho todo.

Bibliografía: Casariego, Nicolás, Héroes y antihéroes en la literatura.

Melville, H. Bartleby y otros cuentos

Vila-Matas, Enrique, Bartlebys y compañía

14 Comentarios:

Ubú dijo...

Esta é unha entrada das que provocan curiosidade, ansia de saber algo máis do tema e dos autores.

Coñecín BARTLEBY EL ESCRIBIENTE hai moitos anos gracias a Borges, quen o traduciu e foi o seu grande valedor ante os lectores en castelán. No prólogo, Borges indica que este relato prefigura a literatura de Kafka e sinala a Bartleby como un protagonista moderno, isto é, un antiheroe. Polo demáis, en BARTLEBY EL ESCRIBIENTE, tamén nalgún conto de Poe, está, en efecto, o xerme do existencialismo.
O que aquí, na entrada, chama a atención é a presentación de dous tipos de Bartlebys: os Bartlebys personaxes e os Bartlebys autores, que nas mans de Vila-Matas rematan por ser personaxes tamén. Os primeiros son doados de recoñecer pero a calificación de Bartleby para os escritores non resulta tan clara, a priori, porque nin todos tolearon, nin todos deixaron de escribir nin todos teñen unha obra breve. Raros, si.
Nembargantes, son Bartlebys, se acaso, porque tomaron como lema o PREFERIRÍA NON FACELO. Juan Rulfo PREFIREU NON escribir máis pois xa dixera todo o que tiña que dicir e continuar sería redundante; outros, cunha obra ben extensa, non deixaron a escritura anque PREFERIRON NON publicar se publicar supoñía escribir ós dictados da moda, satisfacer o malgusto da xente, cumplir prazos coas editoriais ou aparecer en edicións descoidadas e infames (Cristóbal Serra, Julien Gracq, Rafael Pérez Estrada, etc, que non sei se cita Vila-Matas).

José "Pepín" Bello sería un caso especial de Bartleby, a medio camiño entre personaxe e autor. Foi admirado polos seus coetáneos como personaxe peculiar e críticos e escritores gabaron a súa faceta de autor. Nunha entrevista con Vicente Molina Foix, recollida no máis que recomendable libro LA EDAD DE ORO, queda constancia da súa filosofía do Non.
"(...)Cuando se habla con Pepín Bello y se hace referencia a su probado rol de galvanizador o artífice, profeta o cerebro de la Generación del 27, y sobre todo del grupo que él, García Lorca, Buñuel y Dalí formaron en la Residencia de Estudiantes, Bello contesta con una modestia que nunca suena a hueca ni a orgullosa: "No soy nadie." Se le insiste y hasta se le recuerda que todas las memorias y los libros que tratan de ese periodo resuenan con su nombre, siempre en términos de admiración por sus ocurrencias, sus anticipaciones, su agudeza. "No soy nadie". Se saca a relucir la parodia que él y Alberti improvisaron a la salida de un concierto de Satie, mejorando el absurdo musical del francés, o se le cita un verso de sus "canciones cretinas" (...) se le hace recordar su comedia EL POBRE, sometida al examen de un "comité de lectura" formado por Azaña, Pío Baroja y Rivas Cherif (...) Pese a todo el caudal de su vida en vanguardia, Pepín Bello insiste: "No soy nadie".

RESPUESTA. He escrito mucho pero no queda nada. He perdido cartas y he perdido textos escritos en aquella época de la Residencia, porque no les he dado ningún valor. He escrito memorias y las he roto. El género de las memorias es importante, pero yo no."

Mañán máis e espero que mellor.
P.S.- Bartleby o escribán é un bo seudónimo para pasear polos blogs.

Anónimo dijo...

"EL LABERÍNTICO TEMA DEL NO":LOS ÁGRAFOS

El primer bartleby fue Sócrates ,apodado por Zenón "el bufón de Atenas"; a partir de ahí los bartlebys son variados, pero los más auténticos son los creadores que nunca publicaron , porque decidieron no escribir("los autores improductivos" aunque para Marguerite Duras "escribir también es no hablar, es callarse, es aullar sin ruido").Robert Walser ( que aparecerá en otra obra de Vila- Matas: El doctor Pasavento) "sabía que escribir que no se puede escribir es también escribir". Ya no se trata de dejar de escribir porque " se me murió el tío Celerino que me contaba historias" como decía Rulfo.Incluso los podemos encontrar en el arte: Balzac ( "En la obra de arte desconocida") habla de un pintor que solo puede dar forma a un trozo de pie de una mujer soñada.
Mañana, más. Un saludo

Ubú dijo...

Vexo pola hora da túa entrada que a cultura non ten repouso.

Continúo.
"...Bartleby es el abanderado de la resistencia pasiva, la del hombre inacción que busca cambiar el mundo a partir de la reflexión de los otros. Las continuas negativas a los requerimientos del abogado hacen que éste se tambalee por comprobar que está perdiendo el principio de autoridad..."
Pere Calders, nun relatiño titulado SOMOS ASÍ, parece como se lle dera voz ó avogado e o fixera reflexionar: "¡Tú, calla!", le ordenó su superior. Y, a continuación, el jefe experimentó la angustia de no saber qué quería decirle su subordinado. ¿A ver si era algo de interés para el negocio...!

E agora un escritor da nómina BARTLEBY cunha narración que contén un personaxe BARTLEBY.
Francisco Ferrer Lerín é o autor, aínda en activo, dunha copiosa obra moi apreciada que, por non pacer nos pesebres literarios axeitados e conservar a liberdade de escribir sobre calquera tema que lle pete, corre soterrada para a maioría dos lectores.
Ornitólogo, traductor, narrador, poeta, del dixo Pere Gimferrer: "Dudo que alguien, entre los poetas de mi generación, haya emprendido la aventura vanguardista con la libertad imaginativa y el fervor iconoclasta de Ferrer Lerín. Sus relatos, de un poder hipnótico nada frecuente, o sus innumerables pastiches y collages, conservan al cabo de los años todo su poder revulsivo." Aínda así...

EL FRACASO
Un hombre emprende un trabajo arduo y convencido de su capacidad descuida algunos detalles. Estos le hacen fracasar.

De nuevo comienza una obra que seguramente es más amplia y laboriosa. Al principio acuciado por la propia necesidad de éxito acelera enormemente su desarrollo y corona las primeras etapas antes del tiempo prefijado. Esto le hace aminorar la marcha e, imperceptiblemente, cada día realiza algo menos que en el anterior. Así llega a un paro total que lo lleva al fracaso.

Otra vez desea justificarse y acepta una labor importante. La emprende con alegría y rapidez, pero temeroso de cometer algún error la reestructura y racionaliza. De este modo el trabajo se dignifica y pierde trivialidad y gana empaque. Sin embargo, el exceso de metodización le confiere un aspecto agrio y ante la perspectiva de una posible abulia vuelve a la alegría y rapidez con que comenzó. Así llega de nuevo al período en que desea metodizarse y así al período de la alegría. La repetición de estos estados le causa miedo y decide intercalar una etapa que alargue el ciclo. La búsqueda de dicha etapa es difícil y empleado exclusivamente en ello distrae el negocio. De nuevo fracasa.

La vez siguiente prefiere arriesgarse en algo definitivo. Es su trabajo enormemente delicado y difícil con una duración además extraordinariamente larga. Los motivos por los que lo escoge son obvios. Realiza un verdadero juramento ante sí mismo de dedicar toda su vida al logro de la empresa. Calcula los años que le quedan de vida acogiéndose a la media de sus antecesores. Asigna a cada año una parte y así mismo a cada mes y día y hora y minuto y segundo. Construye un calendario que constantemente le indique el punto en que se halla su labor. Elimina dos períodos. El ocupado en agonizar y el ocupado en planificar su obra. Curiosamente al restar del tiempo toda la planificación y la agonía aparece un tiempo asombrosamente ridículo. Acobardado no acierta a realizar con tino la gran cantidad de trabajo acumulado en cada parte del minúsculo tiempo total. El error le vale una rápida expulsión de la férrea empresa. Afortunadamente un fallo en el cálculo de la longitud agónica le hunde antes en ella. Así prematuramente descansa.

Anónimo dijo...

Más sobre el Síndrome Bartleby : la pulsión negativa o la atracción por la nada que hace que ciertos creadores aún teniendo una cultura literaria muy exigente ( o quizás precisamente por eso) no lleguen a escribir nunca ( los ágrafos como Pepín Bello…); o bien escriban algún libro y luego renuncien a la escritura…
RASTREO DE LA LITERATURA DEL NO EN ESPAÑA: Se recoge en la obra a Francisco Ferrer Lerín(nombrado por ti)) que podía haber estado entre los Novísimos y renunció por no aceptar algunos ambientes literarios hostiles y demás. Amigo personal de Pere Gimferrer y Félix de Azua, se marchó a Jaca para estudiar a los buitres!!! Por supuesto está Pepín Bello que repetía con sorna :”Yo soy el Pepín Bello de los manuales y las enclicopedias; también Pedro Garfias en búsqueda obsesiva por el adjetivo. Incluso aparece Bernardo Atxaga que en unas declaraciones a un diario habló de sus escasas ganas de escribir ( por tanto, con los primeros síntomas del mal B.); Miguel Torga (leonés, famoso pos sus cuentos, que ha renunciado a escribir); Jordi Llovet por su declarada falta de imaginación o el fecundo y exigente Juan Ramón J. al que tras la muerte de Zenobia ya no le interesaba nada su obra (“ mi mejor obra es el arrepentimiento de mi obra”( ALGUNAS DE LAS CAUSAS)

¿Cuál es el porqué????? Jaime Gil de Biedma con sus palabras aporta mayor complejidad al laberíntico tema del No:
“Quizá hubiera que decir algo más sobre eso del no escribir. Mucha gente me lo pregunta, yo me lo pregunto y preguntarme por qué no escribo, inevitablemente desemboca en otra inquisición mucho más azorante: ¿por qué escribí? Al fin y al cabo lo normal es leer. Una, que mi poesía consistió- sin yo saberlo- en una tentativa de inventarme una identidad; inventada ya y asumida, no me ocurre más aquello de apostarme entero en cada poema que me ponía a escribir, que era lo que más me apasionaba. Otra que todo fue una equivocación: yo quería ser poeta, pero en el fondo quería ser poema. Y en parte, en mala parte, lo he conseguido; como cualquier poema medianamente bien hecho, ahora carezco de libertad interior, soy todo necesidad y sumisión interna a ese atormentado tirano, a ese Big Brother insomne, omnisciente y ubicuo: yo, mitad Calibán, mitad Narciso, le temo a todo cuando le escucho interrogarme junto a un balcón abierto: “¿Qué hace un muchacho como tú en un año indiferente como éste?”. All the rest is silence”.
UN TEMA APASIONANTE E INQUIETANTE. Salutem, María José

Ubú dijo...

Vou recorrer de novo a un microrrelato de Pere Calders que está en consonancia co Gil de Biedma poeta-poema, e que fala da creación fracasada.

ARS POETICA
Le salió una rima preciosa, de esas que pueden salvar un poema. Pero había nacido viuda, abandonada de la pareja que la justificara, y se quedó sola al final de la línea, sin ley métrica que acudiera en su socorro. Si no se halla remedio, cosas así nos amargarán la vida.

¿Podemos engadir á lista de personaxes BARTLEBY a Peter Pan, o neno que PREFIREU NON medrar?

Nota bene:Estaría moi contento Torga, iberista de pro, con que o consideren leonés, el que dixo: "o universal é o local sen valos". Pero Miguel Torga, salvo erro ou omisión, é un dos máis grandes autores lusos.
No seu libro de contos PEDRAS LABRADAS hai ún maravilloso, Area Humana, no que, Clarisse, Bartleby feminina,pon en práctica a rebelión silenciosa.

Aviso de navegantes- Ferrer Lerín ten un blog personal no que paga a pena entrar: ferrerlerin.blogspot.com

Anónimo dijo...

EL DIFÍCIL ARTE DE DESAPARECER
Retomo las palabras de Biedma : “ser poema” aniquilar o eclipsar el “yo”. Como dice Foucault:”la huella del autor está solo en la singularidad de su ausencia; al escritor le es asignado el papel del muerto en el juego de la escritura”. ¿El placer de esconderse ( tan importante por cierto en la infancia) se relaciona con el miedo de Peter Pan a crecer? No lo sé. Pero creo que ese no es el significado de la rebelión del No .
Ya sé el porqué de la confusión con el origen de Miguel Torga y ella reside en su relación con la proximidad entre el escritor de Tras- Os- Montes , sobre todo en "Cuentos de la montaña" con las tierras de León y Zamora (descripciones, personajes...)

Ubú dijo...

Por puro espírito de contradicción, vou terquear co asunto de Peter Pan:
"¿El placer de esconderse (tan importante por cierto en la infancia) se relaciona con el miedo de Peter Pan a crecer? No lo sé. Pero creo que ese no es el significado de la rebelión del No."

¿O pracer de agocharse? ¿acaso o escribán Bartleby agóchase? Non, por certo.
Atrinchérase no seu universo para facer fronte ó mundo real que non lle gosta e esgrime o PREFERIRÍA NON FACELO como educada arma de resistencia. ¿Agocharse? Bartleby actúa a cara descoberta.
Do mesmo xeito, Peter Pan tamén se parapeta no seu paraíso, PREFERINDO NON medrar, e négase a vivir nun mundo odioso que o vai converter nun ser mineral e uniforme. Incluso a súa praza forte ten unha denominación negativa irreductible, o País de NUNCA XAMÁIS.
Na fin, Bartleby déixase morrer; Peter Pan nalgún momento xa dixera:"Morrer será unha aventura sensacional"
Peter Pan e Bartleby o escribán non queren ser víctimas dos convencionalismos.

A estas alturas, xa sen freo e sen vergoña, voume meter con Kafka porque, ó mellor, Peter Pan non é un personaxe Bartleby pero ¿é un Bartleby o protagonista de O PROCESO, novela que colocas baixo o epígrafe de Literatura do Non?

Vexamos. Joseph K. non se rebela en absoluto nin practica a resistencia pasiva. Pola contra, tenta solucionar o seu problema polos cauces legais previstos predominantes, nos que confía, e non permanece inactivo, precisamente, senón que desgasta corredores, fatiga xuíces, contrata avogados, solicita apelacións e procura coartadas, explicacións ou testemuñas no seu descárrego. Desespera pero non se deixa ir.
Tampouco Joseph K. renuncia a vivir. A súa preocupación esencial é clarexar o equívoco e seguir coa súa vida de antes e, ó longo da novela, non desprecia os escarceos sexuais.
A inacción, a resistencia pasiva e o abandono que caracterizan a Bartleby non se dan en Joseph K. O que para áquel era PREFIRO NON FACELO, para éste é FAGO CALQUERA COUSA PARA SAÍR DO FREGADO.

Iso si, as dúas historias teñen coma pano de fondo o mundiño da burocracia.

Anónimo dijo...

BARTLEBY: LA SOLEDAD DEL HOMBRE CONTEMPORÁNEO
Cada uno de los pasos hacia la liberación de Bartleby están marcados por la frase cortés “preferiría no hacerlo”. El escribiente es así un rebelde callado, pero valiente y tenaz, ante un mundo injusto. Su lucha contra la explotación es también la lucha del hombre que se abandona ante la imposibilidad de la esperanza de futuro. Soledad, angustia y un futuro incierto : la tragedia del hombre contemporáneo, un antihéroe que me recuerda en mucho a don Quijote: “Nuestra modernidad nace bajo el signo de un héroe delirante y ridiculizado- don Quijote- y va acumulando sarcasmos y recelos sobre el heroísmo hasta que poco a poco sólo queda la convicción de su FRACASO INEVITABLE”: Los héroes vencidos.
Quien cita a Joseph K. en relación con Bartleby es Nicolás Casariego en Héroes y antihéroes ( AÑADE Jacob von Gunten de Robert Walser). En todos los casos se trata de personajes infrecuentes e intrigantes: Bartleby se empeña en hundirse en su soledad; Joseph K. permite que se acuse, juzgue y condene por un cargo que desconoce, sin apenas rebelarse. Ambos mueren, tras una vida sin sentido, casi pidiendo perdón por haber vivido, como dos víctimas. Para Vila- MATAS el Bartleby es el propio Kafka ( “… el recuerdo de un domingo lluvioso que Kafka registró en sus Diarios: un domingo en el que el escritor, por culpa de Goethe, se siente invadido por una total parálisis de escritura y se pasa el día mirando fijamente sus dedos, presa del síndrome Bartleby”)…
MÁS SOBRE EL LABERINTO DEL NO:

…”Me dispongo, pues, a pasear por el Laberinto del No, por los senderos de la más perturbadora y atractiva tendencia de las literaturas contemporáneas: una tendencia en la que se encuentra el único camino que queda abierto a la creación literaria: una tendencia que se pregunta qué es la escritura y dónde está y que merodea alrededor de la imposibilidad de la misma y que dice la verdad sobre el estado de pronóstico grave- pero sumamente estimulante- de la literatura de este fin de milenio.
Sólo de la pulsión negativa, solo del laberinto del No puede surgir la escritura por venir. ¿Pero cómo será esa literatura? Hace poco, con cierta malicia, me lo preguntó un compañero de oficina.
-No lo sé- le dije-. Si lo supiera, la haría yo mismo.
A ver si soy capaz de hacerla. Estoy convencido de que sólo del rastreo del laberinto del No pueden surgir los caminos que quedan abiertos para la escritura que viene. A ver si soy capaz de sugerirlos. Escribiré notas a pies de página que comentarán un texto invisible, y no por eso inexistente, ya que muy bien podría ser que ese texto fantasma acabe quedando como en suspensión en la literatura del próximo milenio” ( Habla Marcelo, un oficinista que trabaja en "una oficina pavorosa", que nunca tuvo suerte con las mujeres y soporta con resignación una penosa joroba, además de ser un solitario.)

VILA-MATAS, Bartleby y compañía. Anagrama
Salutem

Ubú dijo...

Feita a aclaración, Padre Ubú, co interese que o caracteriza e dado que é algo que sae de balde, descúlpase con María José, coa que prefire manter boas relacións pois nunca se sabe de quén terá ún que aproveitarse para medrar.

Se o que suxire Nicolás Casariego é que Joseph K. comparte con Bartleby a condición de antiheroe, non teño nada que opoñer, estou dacordo.
Como tamén estou dacordo con Vila-Matas en calificar a Kafka coma un autor Bartleby.

"La literatura del siglo XX, por lo tanto, ya no cuenta historias colmadas de hazañas, conquistas y pasiones, sino sólo los restos de ellas. El sentimiento de lo heroico se ha desvanecido y ha dejado paso al sentimiento de lo absurdo. Se trata de historias de hombres amedrentados y oprimidos, que huyen o se esconden del mundo, que suelen poner su vida al servicio de una renuncia y que, despersonalizados y desposeídos de todo, la llevan a sus últimas consecuencias, es decir, se desgarran el corazón y las entrañas por la incierta posibilidad, diría yo, de alcanzar la libertad. Son héroes de la negación, seres fallidos, cuyas vidas se hallan despojadas de cualquier heroísmo y oscilan, como un péndulo, entre la posibilidad e imposibilidad de realizarse a sí mismas. Sus destinos fluyen por esa corriente de ambigüedades e incertezas, se deslizan por los confines de lo absurdo y, con una lucidez estéril, se enfrentan al silencio irrazonable del mundo."
Mónica Monteys no epílogo do libro HÉROES DE FICCIÓN.

Unha forte aperta.

Ubú dijo...

É un "maldito", é un esquizofrénico e o seu fogar é un manicomio. Tamén tivo a tentación de ser poema.

DEDICATORIA

Más allá de donde
aún se esconde la vida, queda
un reino, queda cultivar
como un rey su agonía,
hacer florecer como un reino
la sucia flor de la agonía:
yo que todo lo prostituí, aún puedo
prostituir mi muerte y hacer
de mi cadáver el último poema.

Leopoldo María PANERO

Lúa dijo...

En la pintura, la negación de la luz es la sombra, su ausencia. En la imagen de Warhol, la proyección de su sombra, pretende desvelar el misterio de la dualidad y lo antagónico de la personalidad humana, que nos resulta inquietante.

Ubú dijo...

Un comentario moi apropiado para alguén que se presenta como Lúa.
Non sei se ésta é unha Lúa Nova ou é aquela Lúa que apareceu no ceo do CUADERNO hai cinco meses. Trátase desta última, deduzo, porque segue a falar de arte anque,en calquera caso, o que interesaría sería que non fora unha Lúa Minguante.
Dous comentarios nun mesmo día son un bo augurio.
Un saúdo.

Lúa dijo...

TENERSE, a la sombra
del estigma en el aire.

Tenerse, por nadie ni por nada.
Incógnito,
por tí
solo.

Con todo lo que dentro cabe,
también sin
lenguaje.

Paul CELAN, "Cambio de aliento", 1967

Ubú,nací en Luna Llena y me renuevo a través de las fases. A veces, soy Nueva y no se me ve...ahora, estoy en fase Creciente, y me asomo, por eso me ves...

Ubú dijo...

Un comentario máis, non hai dúbida que es Lúa Crecente.
Di o proverbio chinés que cando o dedo sinala a Lúa, o parvo mira o dedo. Quero pensar que eu son dos que fitan a Lúa.
Saúdos.

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